Canaliculitis

jueves, 4 de octubre de 2007

La canaliculitis es la inflamación crónica del canalículo lagrimal. Afecta con más frecuencia al canalículo inferior que al superior aunque puede comprometer a ambos y puede ser uni o bilateral. Se ve sobre todo en individuos por encima de los 50 años, no obstante puede afectar a cualquier edad y es una afección poco frecuente.1-6
Aunque el agente causal más común es el Actinomices Israelii, existen otros gérmenes que con menos frecuencia, pueden ocasionarla como en el caso de infecciones virales por herpes simple, en pacientes por debajo de los 20 años, infecciones por Fusarium, Cándida, propinebacterium, enterobacter, nocardias, y especies de aspergillus. Con menos frecuencia puede resultar de una complicación por el uso de tapones lagrimales de silicona, o después del tratamiento por quimioterapia utilizando el 5-fluoracilo.
Esta afección ocular es con frecuencia mal diagnosticada, lo que da lugar a múltiples fracasos terapéuticos, puesto que no responde a tratamiento médico con colirios antibióticos; debe ser considerada como diagnóstico diferencial en la conjuntivitis crónica, que no responde a tratamiento convencional, en las blefaritis, los chalacios y con la dacriocistitis. Las manifestaciones clínicas desde el punto de vista subjetivo son: lagrimeo, ojo rojo, sensación de cuerpo extraño y presencia de secreción que varía desde acuosa a mucopurulenta, uni o bilateral. Al examen físico se constata la hiperemia conjuntival tarsal y bulbar en el área que rodea al canalículo afectado, aparece el clásico Pouting punctum, es decir el punto lagrimal esta rojo dilatado, edematoso y desviado hacia fuera, a la manipulación del mismo o del canalículo se exteriorizan secreciones y a veces , concreciones o dacriolitos de color amarillento, que pueden llegar a alcanzar el tamaño de un gisante y que no son otra cosa que acumulaciones de bacilos que impiden el drenaje lagrimal. El sondaje lagrimal revela signos diagnósticos adicionales: el canalículo está dilatado y la obstrucción corrobora la presencia de dacriolitos; la piel del canto medial esta enrojecida e inflamada; el test de Jones es negativo. El diagnóstico se establece por el cuadro clínico, el examen microbiológico así como por la dacriocistografía y el ultrasonido, donde puede observarse el canalículo dilatado además de revelar la presencia de dacriolitos y divertículos. El tratamiento de elección es el quirúrgico y consiste en la canalículotomía con preservación del punto lagrimal, evacuando así todos los dacriolitos.2005

Datos personales